Cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte
se dicen las verdades
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.
Entender a la educación como el camino insoslayable para diseñar, construir y desarrollar un futuro promisorio para nuestra sociedad, parte de la crítica a los poderes hegemónicos, fue una de las premisas que envolvió al XI Congreso Nacional de Investigación Educativa organizado por el Comie.
Al dominar el espacio y el tiempo en el devenir de nuestro camino, no queda sino el movimiento como realidad palpable, de ahí la importancia de replantearse constantemente el valor de los paradigmas establecidos.
El nuestro, actualmente, lo conocemos como neoliberalismo y/o economía de mercado. Aún en nuestro tierno siglo XXI, sólo tres de cada cien indígenas puede acceder a la educación superior en México, apuntemos esto como dato para ejemplificar la exclusión que produce la dinámica neoliberal.La actual economía de mercado se "adueña de la mentalidad de los individuos", los absorbe y los infla de ganas de lucro, fue el argumento que planteó la académica Marcela Mollis, contra esta hegemonía, compartía la investigadora; la escuela puede responder como un contrapeso a los modelos de consumo, estos que enajenan, los que Manuel Gil llama: "soledad".
La economía de mercado, debemos comprender, es algo tan cotidiano como sacar la coca del refrí (LG). Que la escuela sea una fuerza anti-hegemónica, tiene que ver con algo que cuestionaba un profesor estudiante de la maestría en educación, ¿qué tanto afecta la forma en la que me visto, en mi ambiente de aprendizaje? En la escuela (privada) que trabajo, me orillan a vestirme de una forma determinada.
Es el tema, ¿contemplamos a los maestros como artistas de la representación? ¿La escuela está diseñada para preservar el orden de las cosas o más bien tiene la capacidad de influir un espíritu crítico en los educandos para que estos transformen la realidad de su entorno.
Invitada al congreso, la investigadora de la UIA, Silvia Schmelkes, llamó la atención sobre este tema de una manera muy peculiar. La académica aseguró de forma categórica que la dependencia federal encargada de regular la educación en el país -la SEP-, desconfía de sus maestros, pues instruye todas sus acciones y no los contempla como tomadores de decisiones.
Por si esto no bastara para afectar al sistema educativo mexicano, decía Schmelkes que la educación en México es el reflejo de las marcadas desigualdades sociales, toda vez que el acceso y la oportunidad de permanecer en la escuela es injusta, nuestros niños y jóvenes no tienen las mismas oportunidades para prepararse frente a una economía cada vez más demandante.
Mi convicción es el combate a la desigualdad comentaba el Hugo Casanova Cardiel -actual presidente del Comie- desde la investigación y desde el saber, impulsar el México que todos merecemos.
Podemos parafrasear a Gabriel Celaya y decir que la educación es un arma cargada de futuro -le pregunto en entrevista - y Hugo Casanova, asiente.
El trabajo coincide con la convicción. "En los tiempos que corren", decía Paco Ibañez, "lamentablemente" tenemos que seguir recordando estos versos.
Es curioso, mientras la entrevista con Hugo Casanova transcurría, el helicóptero del secretario de Gobernación, sufriría un percance fatal, serán las nubes, será nuestra actual situación, descanse en Paz, José Francisco Blake Mora.
Nos quedamos los vivos, lo que son las cosas, el mismo día, la Presidencia de la República, confirma que Alonso Lujambio, titular de la SEP, es tratado en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, por un mieloma múltiple (cáncer en la médula o sea), no obstante, como es Lujambio y como confirman que está, lo esperamos pronto en las ruedas de prensa. Salud y Fortaleza.
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